Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Corintios 9, 2-15

2 Conozco, en efecto, vuestra prontitud de ánimo, de la que me glorío
ante los macedonios diciéndoles que Acaya está preparada desde el año
pasado. Y vuestro celo ha estimulado a muchísimos.

3 No obstante, os envío a los hermanos para que nuestro motivo de
gloria respecto de vosotros no se desvanezca en este particular y
estéis
preparados como os decía.

4 No sea que vayan los macedonios conmigo y os encuentren sin
prepararos, y nuestra gran confianza se torne en confusión nuestra, por no
decir vuestra.

5 Por tanto, he creído necesario rogar a los hermanos que vayan antes
donde vosotros y preparen de antemano vuestros ya anunciados generosos
dones, a fin de que sean preparados como dones generosos y no como una
tacañería.

6 Mirad: el que siembra con mezquindad, cosechará también con
mezquindad; el que siembra en abundancia, cosechará también
en
abundancia.


7 Cada cual dé según el dictamen de su corazón, no de mala gana ni
forzado, pues: = Dios ama al que da con alegría. =

8 Y poderoso es Dios para colmaros de toda gracia a fin de que
teniendo, siempre y en todo, todo lo necesario, tengáis aún sobrante para
toda obra buena.

9 Como está escrito: = Repartió a manos llenas; dio a los pobres; su
justicia permanece eternamente. =

10 Aquel que provee = de simiente al sembrador y de pan para su
alimento, = proveerá y multiplicará vuestra sementera y aumentará =
los
frutos de vuestra justicia. =

11 Sois ricos en todo para toda largueza, la cual provocará por nuestro
medio acciones de gracias a Dios.

12 Porque el servicio de esta ofrenda no sólo provee a las necesidades
de los santos, sino que redunda también en abundantes acciones de gracias a
Dios.

13 Experimentando este servicio, glorifican a Dios por vuestra
obediencia en la profesión del Evangelio de Cristo y por la generosidad de
vuestra comunión con ellos y con todos.

14 Y con su oración por vosotros, manifiestan su gran afecto hacia
vosotros a causa de la gracia sobreabundante que en vosotros ha derramado
Dios.

15 ¡Gracias sean dadas a Dios por su don inefable!